Allí donde solíamos cantar. Love of Lesbian emociona en Madrid Escena

Por Revista Wego

Love of Lesbian es siempre garantía de éxito. No había pasado ni un año de su anterior visita a Madrid, pero esta era la primera vez que  la banda barcelonesa daba un concierto con los aforos y las condiciones de antes de la pandemia. Y el escenario no podía haber sido mejor. Más de 6 mil personas llevaron el  auditorio del parque Enrique Tierno Galván para dar la bienvenida a Love of Lesbian, que presentaban en directo su nuevo disco – y ya van 11- V.E.H.N (Viaje Épico hacia la nada).

Una noche para el recuerdo con cerca de dos horas de actuación y un espectáculo, que además de los musical incluye distintas pantallas y una puesta en escena de primer nivel. Love of Lesbian volvían a Madrid tras un semestre girando por América y EEUU y había ganas de escucharlos.

Lleno de anécdotas, como suelen hacerlo, Santi Balmes y Julian Saldarriaga amenizaron los espacios entre canciones para agradecer al público su asistencia. «es increíble que haya tanta gente que quiera ver un concierto individual de nosotros y no solo escuchar los hits» Decía Balmes en referencia a que su paso por España se estaba dando dentro de Festivales, como del que venía de tocar la noche anterior en Valencia. «Habíamos caído en la inercia y cuando algo te falta, ves lo que lo echas de menos», aseguró ante un público completamente entregado con el que, en principio, no volverán a encontrarse hasta 2023. Posiblemente sea un fin de gira en el Wizinkcenter de Madrid

Los temas nuevos del aclamado ‘Viaje Épico hacia la Nada’ dieron el pistoletazo de salida a su actuación en Madrid, intercalados con otros que se han convertido en verdaderos himnos como ‘1999’, ‘Segundo asalto’, ‘Belice’ o un coreadísimo ‘Incendios de nieve’. También hubo momentos para la catarsis con ‘Bajo el volcán’ y ‘Cuando no me ves’, sin olvidar el baile con el ‘Club de fans de John Boy’, ‘Algunas plantas’ o ‘Los toros en la Wii’, todo ello en un sencillo escenario que combinaba al fondo imágenes de vídeo pero que cedía todo el protagonismo a la banda, que recordó entre risas aquellos primeros conciertos «a los que fueron solo dos personas».

«¡Cómo echábamos de menos! Cada concierto lo valoramos. Es regresar allí donde solíamos cantar», confesaba Balmes al público antes de entonar al unísono ‘Allí donde solíamos gritar’, prácticamente en la recta final de un concierto que se despidió con ‘Planeador’ y un guiño al poeta Halley.