VUELVE EL DV+ Live de Ronda, un cita a medio camino entre un elegante festival boutique y una exaltación dionisiaca del verano

Por Nuria Sanchez

Por Sandra Bulnes

El próximo sábado 10 de junio tenemos la excusa perfecta para pegarnos una escapada a la serranía de Ronda, y esta no es otra que disfrutar de una noche repleta de buen vino y rock con denominación de origen. Sí, podría ser el sueño húmedo de Charles Bukowski, pero no es el caso. Por un lado está Descalzos Viejos, una antigua bodega situada en una finca ajardinada de la Cornisa del Tajo de Ronda. Por otro lado, nos topamos con Happy Place Records, uno de nuestros sellos discográficos más fieles a los presupuestos estéticos del rock and roll. De la confluencia entre ambas “empresas” nació ya hace casi seis años el DV+ Live, un maridaje entre rock y vino que responde claramente al padrinazgo de Andrés (Pájaro) Herrera, encargado desde la primera edición de seleccionar el line-up de esta experiencia socio-cultural disfrazada de festi. Porque si algo no es el DV+ Live es un festival al uso.

Para empezar, no se mueve siguiendo los mecanismos promocionales habituales (hasta ahora el público acudía por el boca oreja, llegando a congregar hasta a 400 personas en una ocasión). También ofrece una oferta basada en un entorno privilegiado, una gastronomía cuidadísima y un formato donde ni caben aglomeraciones ni solapamientos. Su programación ha incluido nombres del calibre de Pelo Mono, Surrounders, Hi Corea!, Chencho Fernández, The Milkyway Express, Furia trinidad, El Twanguero o, por supuesto, Pájaro (habitual en todas las citas excepto en esta de 2017). Hablamos con Joaquín Aneri, codirector de Happy Place Records (Pájaro, Pelo Mono, Miraflores, Cabezafuego, All La Glory) y responsable de la producción artística del DV+ Live, uno de los secretos a voces mejor guardados de oferta cultural andaluza.

Podéis echar un vistazo al ambiente de ediciones pasadas aquí:

¡Wego!: Viñedos, parques naturales, árboles frutales, buen bebercio, bandas de raíces actuando en un formato intimista. ¿Es el Dv+ un festival elitista?

Joaquín Aneri: Para nada. Es más, yo no lo definiría como festival. No es más que una prolongación de una reunión que se hacía en la bodega desde siempre pero abriéndose al público más general y ofreciendo una oferta musical muy cuidada. Al fin y al cabo no es más que una fiesta, una celebración de que empieza el verano.

El cartel de este año es bastante exquisito, incluso más que el de otras ediciones. Contaréis con los sevillanos O Sister!, los chilenos La Big Rabia y el trío catalán Lansbury.

Y tendremos también dos propuestas de djs: Popout! y un Dj set formado por los responsables de Enfrente Arte, un hotel basado en la cultura y la sostenibilidad que regenta el ex manager de dEUS. Este año cumple 20 años de existencia. Antes tenían abierta una galería de arte y un estudio de grabación por donde pasaron Björk y donde dEUS grabaron ‘The Ideal Crash’. Vamos a celebrarlos con ellos. Estamos muy contentos con la propuesta de esta edición. Tenemos a O Sister! (osister.bandcamp.com/), una de las mejores formaciones de swing que hay en Europa. Recrean de una forma encomiable la edad de oro del jazz vocal y la música norteamericana de los años 20 y 30. Es un fresquísimo homenaje a los grupos femeninos de aquella época y están muy reconocidos mundialmente.

Luego tendremos a los chilenos La Big Rabia (labigrabia.bandcamp.com/), una de las nuevas apuestas de Happy Place Records. Fue Pájaro quien decidió contar con ellos y nos los hemos traído en un vuelo transoceánicohasta nuestro estudio de grabación para empezar a trabajar un nuevo álbum que editaremos después de verano. Los presentamos como la gran apuesta desconocida para el público del festival. Es un dúo muy físico que factura una mezcla de blues-rock y psycho-billy fronterizo que lo mismo te recuerda a Tav Falco que a Nick Cave o las pelis de Sergio Leone. Los han definido como los cabecillas de la renovación iberoamericana de la música rock en español. También tienen mucho del Tom Waits de ‘Bone Machine’. Son la banda sonora perfecta para un remake de ‘Abierto hasta el amanecer’.

Por último quiero destacaros a las catalanas Lansbury (lansburytheband.bandcamp.com/releases), un trío de folk con mucha ironía y tela de mala leche que aunque pueden sonar muy lo-fi y naif, encierra mucha bilis debajo de esos cuerpos de inocentes jovencitas intelectualoides.  Podrían recordar a Vainica Doble mezcladas con el Jonathan Richman más socarrón. Son muy divertidas y se ajustan al ambiente que queremos generar.

 ¿Y qué tipo de ambiente es ese?

 Es curioso, pero nuestro público es tan atípico como la propia propuesta. Suele acudir gente de todo tipo. Desde amantes del rock con cierta aspiración hedonista que busca algo diferente o le apetece disfrutar de una noche tranquila en buena compañía, hasta oriundos de la provincia o sibaritas del vino que no suelen ir a conciertos y que deciden rasgarse las vestiduras durante una noche rodeados de unos cuantos patilludos de botín cubano y chupa de cuero. Se genera mucha magia, probablemente por lo ecléctico del asunto. Una cosa sí tenemos clara: no es un evento recomendado si lo que buscas es pillar el ciego y a desfasar metiendo cuello. Aunque si quieres ponerte un poco brillante, hay exquisitos vinos de la provincia. E igual hasta acabas ligando. Pero no es un Tinder con música de fondo.

Ofrecéis vinos de la bodega, como el DV+, que es el que da nombre al festival

Ese es el más famoso de los que produce Descalzos Viejos, pero todos los años se lanza un nuevo vino de la cosecha anterior que Flavio, el dueño y auténtico responsable de que todo esto suceda, presenta en cada nueva edición.

 ¿Y cómo llegan a coincidir un bodeguero y un sello dedicado al rock and roll?

Pues por pura casualidad. Paco (Lamato, la otra mitad de Happy Place y guitarrista de Pájaro) y yo trabajamos en producción televisiva. Un día estábamos grabando una pieza sobre denominación de origen con vinos malagueños y coincidimos con Flavio. Le estaba enseñando el montaje de unas piezas en mi ordenador cuando vio una foto de Elvis Costello que yo tenía de salvapantallas. El tipo me dijo: “Ey, ese es Costello, me encanta. ¿Te gusta la música?”. Le respondí que sí, que de hecho tenía un sello discográfico y pretendía editarle un disco a un tal Pájaro, que fue guitarrista de Silvio y tenía muy buenas canciones. Le puse las maquetas de lo que fue ‘Santa Leone’ y se quedó tan flipado que me obligó a montar un concierto en su bodega con Pájaro y el resto de la banda. Así nación el DV+ Live. Pero no es una iniciativa aislada. Desde entonces en Descalzos Viejos se programa más tipos de música, como conciertos de flamenco, música de cámara o hasta un festival de electrónica que habrá tenido lugar el fin de semana del 2 al 4 de junio. Hablo del Uva, un nombre bastante ilustrativo tratándose de una bodega.

Y Pájaro hace de curador del evento eligiendo cada año a los artistas. Siempre ha tocado en el Dv+ Live, en diversos formatos, pero este año no está.

 Efectivamente, este año estamos presentando a saco ‘He matado al ángel’ y la banda estará el mismo 10 de junio actuando fuera de la península. Y sí, Andrés se ha encargado de seleccionar a las bandas de cada edición teniendo en cuenta siempre dos criterios: que sean de nuestro catálogo o que de algún modo encajen con el tipo de grupos que nos gustaría tener fichados. Hay bandas como Furia Trinidad, Chencho Fernández o Hi Corea! que no son de Happy Place pero los hemos programado. También hay nombres como The Limboos, Guadalupe Plata o Handsome Family que hemos tanteado pero por fechas no hemos podido traerlos. Pero ya caerán.

 Las entradas están a 25 euros en Ticketea. Ahora que proliferan los macro festivales low cost, ¿cómo se está tomando el público ese precio?

Nuestro público quiere pagar para que lo tratemos bien. Hablo de gente que busca una experiencia cómoda. Tenemos mucha afluencia de gente de fuera de España, oriundos de la zona de Marbella y alrededores; un público que entiende el ocio y la cultura como un divertimento, no como una prueba de estrés. Contamos con una superficie de 16 hectáreas verdaderamente alucinante, con unas vistas que pondrían cachondo a Curro Jiménez. Al fin y al cabo hablamos del pueblo que sedujo al mismísimo Hemingway. El escenario se sitúa en la entrada de la bodega, entre los jardines traseros y la cornisa del Tajo, una flipada. La imagen es espectacular y contamos con un servicio de barras donde puedes tomar el vino de la bodega y una gran variedad de tapas de la zona. El equipo técnico es el nuestro, cuidamos cada detalle. Y la oferta musical no merece ni que la mencione de nuevo, se defiende por sí misma. Sinceramente, si tengo que pagar 25 euros por un evento al aire libre, me fiaría antes de algo como lo que hacemos en Ronda que de un mega festival de esos que ofrecen 200 grupos en un ambiente de hacinamiento.

 

+ Info sobre la bodega Descalzos viejos: http://www.descalzosviejos.com/