‘A Ciegas en Manhattan’. Otro libro de viajes es posible
Por 27 julio 2013
Nuria del Saz (Sevilla, 1974) Es periodista y presentadora en Canal Sur TV y Miembro de la Academia de las Ciencia y las Artes de Televisión. Además de su profesión como periodista destaca su actividad como escritora habiendo publicado dos poemarios Alma Atrapada (Ed. Alfar, 2006) y Paraíso Íntimo (Ed. Guadalturia, 2011). En 2013 publica su primera obra narrativa de nuevo con Ediciones Alfar A Ciegas en Manhattan.
La novela cuenta la historia de un flechazo, de una historia de amor de esas que no tienen fin. Nuria del Saz nos trae algo más que una experiencia biográfica, algo más que una guía de viaje, algo más que el acercamiento al mundo de una persona invidente. La autora sevillana consigue eso y mucho más. A través de tres viajes, de confesado referente biográfico, nos relata varias experiencias que se articulan como una sola. Entrelazadas, confundidas, combinadas para hacernos llegar la experiencia compleja, esa que es la suma de todas las partes. No es una simple guía turística, porque no se centra en lo que habitualmente conocemos como tal, sino que es más un libro de viajes como aquellos de tiempos pasados, donde las relaciones interpersonales y la vida cotidiana juegan el papel más importante. Nueva Jersey, Manhattan, son lugares míticos donde los personajes, creados pese al referente real, se desarrollan. Son el decorado necesario para la exposición de brillantes personajes secundarios. Sin menoscabar la ciudad, los edificios, su historia. El personaje protagonista nos revela los desvelos de sus habitantes, sus circunstancias vitales, su forma de vida, con un análisis exhaustivo digno de un trabajo de detective o analista y a la vez transmitiendo cercanía y calor humano. Con un personaje protagonista escrito en primera persona en íntima comunión con los secundarios.
Si un sentimiento predomina y contamina la obra es el humor. Destacando momentos divertidos y curiosos para aquellos que estamos acostumbrados a que prevalezca el sentido de la vista sobre los otros. ¿Una percepción fuera de lo corriente? Quizás. O simplemente una visión personal, al fin y al cabo todos tenemos la nuestra. Y Nuria sabe transmitir muy bien la suya.
Con un lenguaje fluido y muy descriptivo, dejando patente la formación periodística de la autora, es una novela que se lee con facilidad. Sin complicaciones innecesarias, sin adorno y sin maquillaje. Nuria tiene claro de qué quiere hablar y lo expone sin tapujos.