En busca del swing perdido
Por 3 diciembre 2012
Crónica: Thomas Esposito/Fotos: Irene Águila Rodríguez
En la entrevista que realizamos con ella antes de su concierto, Laura Insausti, cantante de Dry Martina, avisó a los que fueran a verlos a la Caja Negra que se pusieran guapos y sacaran brillo a sus zapatos, «porque es probable que se le gasten las suelas y se vaya despeinado/a pero con una sonrisa a casa». Y, efectivamente, el quinteto malagueño no se ahorró nada en esta cita sevillana, brindando a los presentes una noche de agitado swing y complicidad encantadora.
Llegados a Sevilla para promocionar su último trabajo, Momento Perfecto, Dry Martina se presentaba en la Caja Negra con su quinteto base formado por Rafa Insausti a la guitarra, Gerard Mases “Lere” al contrabajo, Jaime Fernández al trombón y Nico Huguenin a la batería. Capitaneando el equipo, la encantadora Laura Insausti y su nuevo (¿o nueva?) acompañante al calentito dentro de su barriga, casualmente el primer miembro del grupo en ser presentado: «No es que me haya hinchado a tapas; de hecho no puedo ni beber, ni fumar, ni comer jamón…».
La banda malagueña se presentó a la numerosa platea de la Caja Negra con su Intro instrumental que dejaba entrever la delgada línea roja que conduciría toda su actuación, una noche donde sus éxitos más actuales se entrelazaron con homenajes a su Olimpo musical, habitado por dioses como Bob Merrill, Louis Prima y Renato Carosone. Batería, contrabajo, trombón y guitarra desenrollaron la alfombra roja por la cual entró Laura, interpretando uno de sus temas más escuchados, Memoria de Pez, con el que empezaba la larga noche de Dry Martina en la Caja Negra. La bienvenida de Laura al público, al final de este tema, quiso aclarar su estado con una suave caricia a la curva de su vientre y una mirada llena de expectación.
A esta primera canción, siguió Dónde vas, una herencia de su primer EP, Musarañas. Un tema lleno de optimismo y movimiento, con gran protagonismo por parte del contrabajo, la batería y el trombón, en perfecto estilo aristogatos. A continuación llegó el momento del tema que da nombre a su último álbum, ese Momento perfecto que aún no ha salido como single, pero que estamos seguros que, de hacerlo, se convertiría pronto en uno de los temas más escuchados. Las letras y la voz seductora de Laura cabalgan un ritmo cálido y casi western, mientras la trompeta subraya los silencios y las pausas y la guitarra de Rafa se luce en solos de tintes ‘tarantinescos’.
Con Woody, volvían al sonido swing de sus orígenes, expresado perfectamente en el anterior disco, Musarañas, entes de de empezar a celebrar sus ídolos con Mambo italiano, tema de Bob Merrill llevado al estrellato por Renato Carosone, en el que Laura empezó a calentar la garganta con algunos agudos que a lo largo del concierto retomaría en temas como el sucesivo Musarañas, al final del cual la cantante protagonizó un divertido dúo con su trombón y corista, Jaime Fernández.
La actuación fluía rápida, a pesar de la duración de algunos temas, y alternaba agradables sesiones instrumentales con momentos de seducción musical donde la voz y la mirada de Laura cautivaban al público. La cantante subrayaba cada final con una mirada traviesa y satisfecha, mientras a su lado el histriónico pero discreto factotum Jaime se hacía cargo del trombón, los coros, la pandereta y la guitarra.
Con Quién sabe, el más popular de su disco, ahora en programación en Canal Fiesta, volvimos a notar ese aire de seducción que apreciamos en Momento Perfecto, antes de volver a bailar con Oh Marie, primero de los tres tributos que la banda concedería a su gurú del swing, Louis Prima. El siguiente tema, Algo más, puso una pausa romántica a una actuación que iba subiendo de intensidad y dejó tiempo a su autor, Rafa Insausti, de lucir algunos plácidos solos de guitarra.
El descanso sirvió a coger fuerzas para lo que viniera a continuación, con la gamberra Saltarnos el guión, su peculiar y larga versión de Gigoló de Louis Prima y la enloquecida He perdido el swing, canción sin pausas y con un ritmo adrenalínico, que hizo que todos los presentes se pusieran a buscar su propio swing.
El primer intento de despedida la banda lo hizo al final del siguiente tema, Se dice, tras un juego de voces entre Laura y los presentes y algunos riffs de cuerdas de Rafa. Sin embargo, como era de esperar, hubo tiempo para otra canción, la enésima versión de Louis Prima, Jump, Jive, An’Wail, tema perfecto para que Laura descansara los pies y dejara todo el protagonismo a sus músicos.
El último tema fue casi un atraco a mano armada, con el público pidiendo a gritos «¡Otra!», mientras Gerard Mases “Lere” ya soñaba en la barra con una caña fresquita. Nada, tuvieron que volver a subir al escenario para concluir una óptima actuación con una canción que los acompaña desde los comienzos, esa Amapolas, que es una fusión perfecta entre la rumba española y el swing.
Terminaron así, con una sonrisa ancha en la cara y un largo, merecido, aplauso de su público.
Lee la entrevista que realizamos con Laura Insausti antes del concierto en la Caja Negra.
Set-list del concierto de Dry Martina en la Caja Negra:
1. Intro
2. Memoria de pez
3. Dónde vas
4. Momento perfecto
5. Woody
6. Mambo italiano (Bob Merrill)
7. Musarañas
8. Quién sabe
9. Oh Marie (Louis Prima)
10. Algo más
11. Saltarnos el guión
12. Gigoló (Louis Prima)
13. He perdido el swiing
14. Se dice
15. Jump, Jive, An’Wail (Louis Prima)
16. Amapolas